Artrosis: causas y síntomas de destrucción, tratamiento y prevención de las articulaciones.

causas de la artrosis de las articulaciones

La artrosis es una patología degenerativa articular, acompañada de procesos de distrofia de los tejidos cartilaginosos. A medida que avanza la enfermedad, la bolsa articular, el aparato ligamentoso, la membrana sinovial y las estructuras óseas más cercanas también participan en el proceso destructivo.

Prevalencia de artrosis

La mayoría de las personas con artrosis son ancianos. La enfermedad después de la marca de edad de 65 años no solo es la patología articular diagnosticada con mayor frecuencia, sino también la principal razón de discapacidad con discapacidad posterior. Además, en la vejez, la mayoría de las mujeres están enfermas, pero entre los jóvenes, la mayoría de los enfermos son hombres.

En diferentes países, la incidencia de osteoartritis varía mucho. Todavía no ha sido posible establecer las razones de la amplia difusión de los datos estadísticos.

Causas y factores de riesgo

La osteoartritis es una enfermedad que puede ser primaria o secundaria. Si no hay razones objetivas para el desarrollo de la patología, hablan del tipo primario. Si fue posible identificar las causas de la artrosis, hablan del tipo secundario.

La artrosis secundaria puede desencadenarse por los siguientes factores negativos:

  • traumatización de articulaciones articulares de diversa naturaleza (caídas frecuentes, esguinces, contusiones);
  • displasia tisular congénita crónica;
  • cambios patológicos en los procesos metabólicos;
  • varias patologías autoinmunes;
  • procesos inflamatorios inespecíficos en el área articular;
  • algunas patologías de los órganos del sistema endocrino;
  • procesos de tipo degenerativo-distrófico, que ocurren de forma crónica;
  • diversas enfermedades, acompañadas de una movilidad articular excesiva, junto con un aparato ligamentoso débil;
  • presencia de hemofilia;
  • tipo específico de procesos inflamatorios.

Además de las causas inmediatas, cuya acción conduce al desarrollo de artrosis, también existen factores predisponentes que no causan la enfermedad por sí mismos, pero pueden aumentar el riesgo de su desarrollo.

factores provocadores para el desarrollo de artrosis

Estos incluyen:

  • tiene más de 55 años;
  • exceso de peso, debido a que aumenta la carga en las articulaciones articulares;
  • carga excesiva en una articulación o grupo en caso de entrenamiento deportivo inadecuado, trabajo específico que requiere una estadía prolongada en una posición;
  • antecedentes de cirugía articular;
  • herencia;
  • cambios hormonales en el cuerpo femenino en la posmenopausia;
  • hipotermia constante;
  • patologías de la columna que no se tratan;
  • ingesta insuficiente de microelementos y macroelementos útiles con los alimentos.

Mecanismo de desarrollo

El mecanismo de desarrollo de la artrosis es bien conocido. El cartílago, que asegura el contacto normal de dos huesos, es naturalmente liso, sin irregularidades ni asperezas, lo que ayuda a mantener el movimiento normal de las articulaciones. Con una enfermedad, la estructura del cartílago cambia, se vuelve áspera, aparecen defectos que reducen la efectividad del deslizamiento natural.

Debido a la irregularidad adquirida, el cartílago se lesiona gradualmente, en lugares comienza a calcificarse y en lugares se osifica. En este caso, es posible separar pequeñas partículas que terminan en el líquido articular y pueden dañar los tejidos circundantes.

A medida que la patología empeora, la articulación puede entrar en un estado de subluxación crónica, lo que deteriorará significativamente su función motora.

Grados

Los médicos dividen la artrosis en tres grados principales:

  • Yo grado.Se caracteriza por la ausencia de un cuadro clínico claro. El paciente puede presentar raras quejas de dolor en la articulación afectada, pero generalmente no consulta a un médico. Al mismo tiempo, se observan cambios en el aparato muscular ligamentoso y el líquido articular, pero aún no hay deformidades visibles.
  • II grado.Los síntomas de la artrosis se vuelven más pronunciados. El dolor se caracteriza por ser soportable, pero se presenta con regularidad. El paciente acude al médico, ya que nota una disminución en la calidad de vida. Se puede escuchar un crujido característico en la articulación afectada. Se observan cambios en las estructuras musculares cercanas, ya que se altera la conducción nerviosa.
  • III grado.Caracterizado por signos pronunciados. El cartílago articular está muy adelgazado, en él se pueden encontrar quistes, focos de calcificación u osificación. El aparato ligamentoso se acorta, lo que conduce a un aumento de la movilidad en el área afectada, que se acompaña de una restricción debido a un proceso inflamatorio pronunciado. El metabolismo de los tejidos circundantes se ve afectado, lo que puede provocar distrofia muscular.

En cualquier caso, el paciente deberá aclarar el diagnóstico del médico tratante. Esto se debe a la especificidad del curso de la enfermedad, que se caracteriza por etapas de remisión y exacerbación, que se reemplazan alternativamente entre sí.

Dolor con enfermedad

dolor en la artrosis de las articulaciones

El dolor en la artrosis es la queja más común con la que los pacientes acuden al médico. Su rasgo característico es su conexión con la hora del día, el clima, la actividad física.

En la mayoría de los pacientes, el dolor se agrava al caminar, correr u otro tipo de actividad física dirigida a la articulación afectada. Tan pronto como la carga se detiene, los dolores disminuyen gradualmente. Su desarrollo se explica por el hecho de que el cartílago ya no puede realizar sus funciones de absorción de impactos.

Por la noche, la incomodidad ocurre con mayor frecuencia como resultado del estancamiento de la sangre en las venas. Otra razón es el aumento de la presión intraósea durante este período.

Uno de los principales criterios diagnósticos es la presencia de los denominados dolores iniciales que molestan al paciente en el momento en que recién comienza el movimiento activo. Los dolores iniciales suelen desaparecer si continúa la actividad física. Su aparición se explica por la presencia de depósitos articulares (detritos) que irritan las terminaciones nerviosas. Tan pronto como estos depósitos se alejan de los nervios, el dolor desaparece.

Síntomas

Además del dolor, los médicos identifican otros signos de artrosis por los que se puede sospechar patología.

Estos incluyen:

  • Dolores y sonido crujiente.Lomota aparece principalmente en el caso de que una persona haya recibido hipotermia. Al principio, el crujido será apenas audible, pero a medida que la enfermedad progrese sin terapia, será audible para las personas que lo rodean.
  • Disminución de la capacidad de movimiento. En una etapa temprana del desarrollo de la patología, no hay disminución de la movilidad. Sin embargo, cuanto más tiempo permanece sin tratar la enfermedad, más fuerte se vuelve la limitación del movimiento en la articulación. Esto se explica por el estrechamiento del espacio articular y el espasmo de las estructuras musculares más cercanas.
  • Deformidad articular.Es característico de la etapa tardía de la artrosis, pero también es un indicador importante del curso de la enfermedad. Durante este período, ya es muy difícil tratar la enfermedad.

¿Qué médico trata la artrosis?

¿Quién trata la artrosis? En la mayoría de los casos, varios especialistas participan en la terapia. En primer lugar, interviene un artrólogo, un especialista en articulaciones. Además, el paciente también deberá visitar a un ortopedista. Si la enfermedad es consecuencia de un proceso inflamatorio, también se recomienda visitar a un reumatólogo.

Si es necesario, otros especialistas pueden participar durante el tratamiento. Muy a menudo, debe recurrir a los servicios de traumatólogos, fisioterapeutas, masajistas, cirujanos.

Diagnóstico

El tratamiento de la artrosis de las articulaciones comienza solo después de que se confirma el diagnóstico y se establece el grado de patología. En primer lugar, el médico entrevista al paciente en detalle y realiza un examen. La presencia de quejas y deformidades características sugiere que existe una enfermedad.

La radiografía de la articulación afectada es una forma obligatoria de confirmar el diagnóstico. Si la enfermedad afecta la rodilla, se toma una imagen de la rodilla, si la patología se encuentra en la mano, los signos radiológicos de la enfermedad se buscan específicamente allí.

El diagnóstico mediante radiografía no siempre da resultados suficientes para diagnosticar al paciente. En este caso, puede ser enviado a una resonancia magnética (esto permitirá evaluar el estado de los tejidos blandos y su participación en el proceso patológico) o una tomografía computarizada (esto permitirá sacar conclusiones sobre el estado de las estructuras óseas y cartilaginosas, la participación de las estructuras anatómicas más cercanas en el proceso patológico).

Tratamiento

métodos para tratar la artrosis de las articulaciones

¿Cómo tratar la artrosis de las articulaciones? La elección de la técnica terapéutica adecuada depende de la gravedad de los síntomas y del estadio de la enfermedad.

El médico selecciona el régimen de terapia después de evaluar el estado general del paciente y el curso de la enfermedad. Se pueden utilizar métodos de tratamiento tanto conservadores como quirúrgicos.

Medicamentos

¿Cómo tratar una enfermedad si es preferible no a la cirugía, sino a utilizar medicamentos?

La terapia conservadora es adecuada para pacientes solo en una etapa temprana de formación de patología e incluirá el uso de tres grupos principales de medicamentos:

  • glucocorticosteroides: los medicamentos hormonales que alivian eficazmente el proceso inflamatorio durante una exacerbación se inyectan en la cavidad articular;
  • medicamentos antiinflamatorios no esteroides,que se inyectan e inyectan principalmente en los músculos cercanos a la articulación o directamente en una vena. Pero los médicos también pueden recomendar pastillas, aunque esta opción para tomar AINE no es deseable debido al efecto negativo en el tracto gastrointestinal;
  • condroprotectores: los medicamentos de este grupo pueden reducir la destrucción del tejido del cartílago y mejorar la regeneración, son especialmente efectivos en las etapas iniciales de la formación de la enfermedad.

Quirúrgico

¿Cómo curar la artrosis, si la enfermedad ha ido lo suficientemente lejos? En este caso, la terapia conservadora será ineficaz y los médicos solo pueden recomendar la cirugía al paciente.

Hoy en día, el reemplazo de articulaciones se realiza en la mayoría de los casos. Durante la operación, la articulación real se reemplaza con una prótesis, que tiene todas las funciones de una articulación sana.

En algunos casos, se proporcionan opciones de terapia paliativa, cuya tarea principal es reducir la carga en las superficies articulares.

Ejercicio

En las primeras etapas de la enfermedad, se trata no solo con medicamentos, sino también con ejercicios de fisioterapia. El ejercicio es una etapa importante de la terapia que ayuda a mantener la funcionalidad de la articulación y reduce la probabilidad de una mayor progresión de la enfermedad.

Dependiendo de la gravedad de la patología y las características individuales del paciente, el conjunto de ejercicios se selecciona individualmente. El médico debe tener en cuenta la localización de la artrosis, lo que permite el efecto más efectivo sobre los tejidos afectados.

No se recomienda el autoestudio sin supervisión médica, especialmente en la etapa inicial. Los ejercicios deben seleccionarse para que sean lo más suaves posible, sin movimientos bruscos.

Las clases de terapia con ejercicios son efectivas solo si el paciente dedica un poco de tiempo al complejo recomendado todos los días.

Métodos tradicionales

Remedios caseros para el tratamiento de la artrosis de las articulaciones.

Muchas personas que padecen artrosis se niegan a usar medicamentos o cirugía hasta el último momento. En este caso, los medicamentos alternativos se utilizan como sustitutos de los medicamentos.

Las plantas más utilizadas en terapia son:

  • Kalanchoe;
  • jengibre;
  • infierno;
  • hoja de laurel;
  • ajo;
  • canela;
  • cola de caballo y otros.

Se utilizan en forma de tinturas, decocciones, cataplasmas en la zona afectada. Es importante tener en cuenta que es imposible un tratamiento completo de la enfermedad utilizando solo recetas caseras. Es mejor si las terapias tradicionales se combinan con la medicina tradicional.

Prevención

¿Qué hacer para reducir la probabilidad de desarrollar artrosis en la vejez? Cualquier persona tiene a su disposición medidas preventivas sencillas.

Recomendado:

  • actividad física diaria moderada: caminar, andar en bicicleta, hacer ejercicios sencillos como carga, etc.
  • adherencia a los principios básicos de una dieta saludable: comer con frecuencia, pero poco a poco, evitar la comida rápida, comer en exceso, los alimentos pesados ​​y grasos, comer muchas especias;
  • control de peso: el aumento de peso provoca un aumento de la tensión en las articulaciones, lo que puede provocar artrosis;
  • tratamiento oportuno de enfermedades crónicas que conducen a trastornos metabólicos;
  • el uso de complejos de vitaminas y minerales en caso de que la cantidad de nutrientes aportados con los alimentos se considere insuficiente.

Diferencia entre artritis y artrosis

Mucha gente confunde artritis y artrosis debido a la similitud del sonido. Sin embargo, estas son enfermedades completamente diferentes.

La artritis no se llama distrofia y degeneración en los tejidos articulares, sino cualquier reacción inflamatoria que pueda desarrollarse en la cavidad articular, independientemente de su causa. La inflamación afecta con mayor frecuencia no solo a la articulación, sino también a los músculos más cercanos, los huesos y las estructuras ligamentosas. El dolor en la artritis no está asociado con la actividad física, puede molestar al paciente incluso en reposo y no hay ningún crujido en las articulaciones.

en qué se diferencia la artritis de la artrosis de las articulaciones

En la mayoría de los casos, es imposible distinguir de forma independiente la artritis de la artrosis, ya que el síntoma principal es el dolor y los pacientes rara vez tienen una idea de sus características para cada una de las patologías.

Es mejor confiar el establecimiento de un diagnóstico preciso al médico tratante para no cometer errores con el tratamiento posterior y la prevención de la enfermedad.

La artrosis es una patología grave que puede provocar discapacidad si el paciente no ve a un médico a tiempo. Ante los primeros signos de la enfermedad, se recomienda contactar a un especialista para confirmar el diagnóstico y seleccionar el tratamiento más óptimo.

Si es posible contraer la enfermedad en una etapa temprana de desarrollo, entonces seguramente será posible hacerlo incluso sin intervención quirúrgica, limitándose solo al tratamiento conservador.